Con tan solo abrir la suave hoja del tamal caliente que envuelve a la humita recién cocinada, nuestro corazón va a empezar a enamorarse muy rápidamente de este platillo. Y cuando nuestra boca encuentre el sabor del choclo, con el queso y la manteca, sin darnos cuenta, estaremos dentro de una nueva relación romántica con el platillo.
Tiempo de preparación20 minutosmin
Tiempo de cocción40 minutosmin
Tiempo total1 horah
Plato: Aperitivo, Plato principal
Cocina: Cocina Boliviana
Etiqueta: Postres
Raciones: 8personas
Calorías: 140kcal
Autor: Cocina Boliviana
Cost: 6
Utensilios
1 Batán o licuadora
1 Cuchillo
1 Choclo
1 Olla
Ingredientes
4tazasChoclo tierno molido
1tazaAjí coloradomolido
300grManteca
250mlAgua hirviendo
1cdaSal a gusto
2cdasAzúcar
300grQueso
1cditaAnís en grano
Elaboración paso a paso
PASO 1: Pelar el choclo cortándolo con un cuchillo para des granearlo. Con los granos sacados, molerlos en un batán o licuadora.
PASO 2: Colocar el choclo en una fuente grande mientras se derrite la manteca en una sartén caliente. Vaciar la manteca derretida a la fuente con el choclo molido. Luego colocar sal, azúcar, canela molida y anís molido.
PASO 3: Desmenuzar el queso y colocar también a la fuente con el choclo molido. Mezclar toda la preparación y dejar reposar por unos minutos.
PASO 4: Seleccionar las hojas más grandes del choclo y hacer tiritas a modo de pitas dela misma hoja.
PASO 5: Con dos hojas hacer una camita en forma de rombo. Colocar sobre esta cama tres cucharas de choclo molido. Doblas las hojas y amarrar con cuidado con las pitas hechas en base a las hojas de choclo.
PASO 6: Colocar en una olla cuarta parte de agua. Dejar que hierva. Cuando este hirviendo colocar las humitas y taparla bien para que se cocine con el vapor del agua.
PASO 7: Dejar cocer las humitas en una olla por 30 minutos.
PASO 8: Una vez cocidas retirar de la olla. Se come caliente acompañadas de café o mate.
Notas
Notas y recomendaciones:Los ingredientes que la humita lleva son mayormente irreemplazables ya qué es un platillo muy tradicional, que lleva pocos preparativos y qué no admite demasiada invención si es qué quieres conservar su sabor de lo más original posible.La humita puede comerse con la mano o con cubiertos desde la misma hoja de la mazorca sin necesidad necesariamente de pasar a un plato. Eso queda en tus gustos y en lo que siente cada uno a la hora de querer deleitarse con esta ricura.¡Esperamos que disfrutes de esta delicia tradicional!